¡El asombroso factor Sueco!
¡El asombroso factor Sueco!
Hammarby Sjostad , el caso Europeo más exitoso de inversión social
Suecia es “la sociedad más exitosa que el mundo jamás ha conocido”, declara el periódico de izquierda The Guardian; “los suecos lideran las reformas en Europa”, declara el periódico capitalista Financial Times; sólo el modelo nórdico “combina tanto equidad como eficiencia”, explica un reporte reciente de la Comisión Europea.
Para los europeos no hay duda, Suecia es el país que genera los mejores cambios urbanos en el mundo, en beneficio de una sociedad igualitaria y cada vez con mayor acceso a bienes de capital y de consumo. Le llaman “El factor Sueco”.
Para los suecos no hay duda, Hammarby Sjöstad, es el desarrollo que recorre la frontera de lo sustentable hacia la consolidación social, comercial y cultural de Estocolmo.
Hammarby Sjöstad o “la ciudad que rodea el lago Hammarby” es una comunidad desarrollada en 200 hectáreas con 9.000 departamentos, el cual alberga una población de 20.000 personas, y 200.000 metros cuadrados de espacio de piso comercial atrayendo a otras 10.000 personas para trabajar en la zona.
Este desarrollo es una enorme lección para las ciudades del mundo que pretendan reciclar áreas urbanas en desuso, como por ejemplo las viejas áreas industriales de nuestras ciudades, rodeadas de guetos pobres con malolientes cloacas. De ahí precisamente idearon invertir en el sur de Estocolmo para desarrollar una comunidad que hoy es orgullo de los suecos y es el caso de éxito en urbanismo sustentable reciente, de mayor impacto en Europa.
Este desarrollo tiene 9,000 viviendas y con poco menos de 5,000 automóviles residentes, resuelve su movilidad mediante ferry, tranvía y bicicletas principalmente, solo poco más de la mitad de los Hammerbienses ocupan un automóvil.
El ADN del desarrollo es:
• Densidades urbanas de 5 o 6 niveles, la llamada densidad verde que garantiza territorio eficiente del desarrollo con distancias de recorrido cortas para los usuarios y visitantes.
• Movilidad universal, diversos modos de llegar y moverse a través del desarrollo privilegiando a los peatones, discapacitados, ciclistas y al transporte público.
• Las aguas residuales de los apartamentos se convierte en energía térmica y biogás para su uso en plantas de calefacción del distrito y los vehículos de transporte público.
• Los residuos sólidos resultantes de la transformación de las aguas residuales se convierten en abono y se utiliza en la forestación, ahí mismo en las áreas verdes de Hammerby.
• la basura se recoge con el sistema de residuos ENVAC, los residuos se acopian y se transportan a través de una red de tuberías subterráneas a los puntos centrales para la recolección por medios neumáticos, lo cual asegura que no hay basura en las calles ni malolientes contenedores de basura en el paisaje urbano.
• En la traza urbana, existen múltiples calles solo para peatones, el automóvil se restringe a calles de acceso a estacionamientos y algunas áreas comerciales.
• Existe un eminente esfuerzo por la creación y mantenimiento de áreas verdes y cuerpos de agua vinculados a zonas de esparcimiento para niños, jóvenes y adultos.
• La mezcla de usos de suelo permite la presencia de comercio y servicios en las plantas bajas de los departamentos, esto permite que las distancias hacia el Kinder, la Oficina y la Tienda sean cortas y eficientes, desactivando el uso del automóvil.
En Suecia no existe la vivienda social, pero existen políticas para poder comprar o rentar en el mercado inmobiliario abierto, departamentos que ofrezcan la mejor calidad de vida a los Suecos. Esto hace que desarrollos como Hammerby se activen fácilmente ya que la oferta es de calidad y facilita la vida a sus residentes.
El origen del proyecto es eminentemente sustentable, al reciclar una vetusta zona industrial decadente del sur de la ciudad y crear el barrio con mejores componentes sustentables a un precio asequible gracias a las políticas de inversión público-privadas Suecas, le enseña al mundo como crear valor con inversiones inteligentes en favor de la gente.
El 80% de los desplazamientos de sus 26.000 habitantes se hacen a pie, en bicicleta o en transporte público mediante un tranvía eléctrico que recorre la calle principal. En este barrio se ha conseguido reducir en un 40% el uso del coche privado.
Las lecciones que podemos aprender de este desarrollo, tanto autoridades como inversionistas en México, son diversas y profundas.
Este desarrollo demuestra con categoría, que hablar de comunidades y desarrollos sustentables tiene que tener como primera condición un buen manejo de la Movilidad y la Densidad urbana, más que poner árboles o separar la basura. Ambas cosas hay que hacerlas!, pero el buen manejo de factores urbanos tiene por mucho, menor huella de carbono que un desarrollo sin esta primer condición.
En la sustentabilidad social, se ha demostrado innumerables ocasiones que el tejido natural social de una comunidad es mejor que segregar por ingreso a la población.
Los desarrollos que reciclan partes de la ciudad en desuso, tienen apoyos y financiamientos que facilitan el desarrollo y los privilegia para insertarlos en la trama urbana con productos actualizados, gana la ciudad, gana el inversionista y ganan los usuarios.
En México nuestras autoridades e inversionistas insisten en invertir en viviendas unifamiliares, colonias de casas en -clusters o privadas- que se han hecho hasta el cansancio. Debemos aprender lo antes posible de las experiencias de éxito en otras partes del mundo, los cuales han desarrollado modelos con mejor calidad a mejores precios y con visiones de sustentabilidad de vanguardia, que los nuestros.
Max Navarro
13 noviembre, 2019 5:15 pmEl factor Sueco avanza mejor y más rápido que cualquier país del G7 !!!